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ELLA Y SU PADRE

 

El, un niño que no recibió mucho amor en el entorno familiar.

 

Eso lo llevo a ser un tanto frio, indiferente.

Conoció a Ella la tercera de cuatro hermanos, se casaron, formaron una familia, tuvieron primero a una niña, para el la luz de sus ojos, cuando la niña tenia dos años y medios, nació el niño, un clon a su padre.

El, trabajaba en barcos era ingeniero naval, cuando estaba en casa, solo quería paz y tranquilidad, cosa que a veces se hacía muy difícil, ya que sus hijos un tanto rebeldes, se lo complicaban.

Los años pasaron, sus hijos toman la decisión de irse del país para poder buscar un futuro para sus propios hijos, uno en cada punto, del planeta.

Aquí comienza la enfermedad de EL, su padre.

Diagnosticado con PARKINSON, no parecía que tuviera esa enfermedad, no había temblores, pero si perdidas de memorias y alguna que otra vez ataques tipo convulsión, cuando le daban los ataques, su hija le hacía mimos en la espalda y le decía relajate papi, ya va a pasar, (por unos años ella vivió en su ciudad).

Un octubre, ella recibe la llamada de su madre y toma la decisión de viajar a su ciudad natal.

Al llegar vio una persona en una cama de Hospital, no era su padre, al verle, no tenia nada parecido a él, al mirarle a los ojos, supo que ahí, en lo más profundo estaba su padre.

Ya no había más nada que hacer, solo esperar, esperar que él decidiera marchar.

 

Hay fotografías que, quizás no sean del agrado de todo el mundo, recordar que son fotografías documental

Entre pasillo de un hospital, tubos de oxígeno, gotero del suero que iban y venían,  escaras, ya en gran parte del cuerpo, que fueron tapadas con delicadas vendas, él aguantaba, esperaba, si esperaba la llegada de su niño, cuando su hijo fue a verle al hospital, era ver a su padre de joven, dos gotas de agua.

Seis días, pasaron, de estar con él, de hablarle, mimarle, limpiarlo, decirle que lo amaba mucho, mucho, que ya no tenia más nada que hacer aquí, que dejara de sufrir, seis días de agonía, una noche su hija se recordó que él le decía, el ser humano, en el único momento que estaba en paz, era en el vientre de la madre, con esos sonidos, que inspiraban paz, entonces fue, cuando ella, su hija, comenzó una noche de martes a hablarle al oído y decirle YO TE PERDONO, DE TODO MAL QUE HAYAS PODIDO HACER, ESCUCHA EL SONIDO, como te relaja, viaja, ella le puso el sonido del vientre materno y lo alternaba con sonidos del mar, ella sabia que él escuchaba esos sonidos, ella le decía que ya no aguantara más, que se podía ir tranquilo.

Al otro día,  en la mañana de miércoles, su hija volvió hablarle y a ponerle los sonidos, se los alternaba, luego de un rato, su hija se marcho, se fue hacer algunos papeleos de su padre, a las tres horas la llaman y le dicen, TU PAPÁ SE HA IDO.

Ella, respiro profundo, salio corriendo hasta donde él estaba, y lo encontró dormido en la cama del hospital, lo abrazo fuerte, muy fuerte y le dijo.
YA ESTÁS TRANQUILO.

ETERNAMENTE MI PAPÁ, algún día nos volveremos a ver, no deseo a nadie lo que pasaste hasta tu partida, ningún hijo debería de ver sufrir a su padre, espero que estes bien, donde quiera que estes. TE AMO PAPÁ.

 

Reportaje Documental, las fotografías  no son perfectas, en la edición se verán las fotos saturadas, (así es como decidió la hija) lo que he querido mostrar en ellas, es el sentimiento,  de una hija hacia su padre en el lecho de muerte.

¿Seguimos descubriendo ?

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